Cristina Enea. Un parque en la ciudad

Hola, si me lo permitís, me gustaría contaros mi historia. Aunque suelo ser confundida con doña María Cristina, la que fuera reina de España, yo soy otra Cristina. Soy la que da nombre al parque Cristina Enea de San Sebastián…

El 2 de junio de 1926 las puertas de la antigua finca de los duques de Mandas se abrieron por primera vez a la ciudadanía, para que pudiera disfrutar de sus encantadores caminos, prados, bosquetes… Una finca privada se convirtió así en parque público.

El duque, don Fermín Lasala y Collado, era -y es- un donostiarra bien conocido, pero poco se sabe sobre su esposa, doña Cristina Brunetti y Gayoso de los Cobos. Y sin embargo, fue ella la que aportó el título nobiliario a la pareja, la que durante más tiempo disfrutó de sus jardines donostiarras, terminando sus días en ese palacete rodeado de los bosques y campiñas que tanto amaba.

El parque de Cristina Enea toma el nombre de la duquesa de Mandas, y es ella, Cristina, la que en primera persona nos cuenta quién fue, cómo vivió y qué supuso para ella este lugar en el mundo.

Cliente

Cristina Enea Fundazioa

Equipo

Coordinación:
K6 Gestión Cultural

Museografía:
Marmol estudioa
Kómodo interiorismo

Diseño gráfico:
Marmol estudioa

Fotografías:
Txesma Tape Estudio